Cómo superar la "violación del alma"

Para salir de una relación de pareja con un(a) psicópata es indispensable la aceptación de la realidad y aceptar una realidad tan dura, es un proceso muy doloroso porque a veces llevamos años o décadas conviviendo con un(a) psicópata, por eso cuesta tanto ver esa realidad.

Ese contacto con un dolor tan desgarrador es el comienzo de la curación. La curación no es posible si no aceptamos que hemos perdido muchas cosas; es imposible salir ileso(a) de un vínculo con una pareja psicópata. En este tipo de relaciones siempre perdemos, hay diferentes grados de daño: a veces cosas tan esenciales como la salud, el trabajo, la capacidad de trabajar, relaciones con los hijos, familia y amigos, la sonrisa o incluso la vida.

El gran peligro es que la disonancia que provoca tanto tiempo de maltrato nos lleva a mantenernos enganchados en esa relación psicopática pensando que todo el sufrimiento no pudo haber sido en vano, que tiene que haber una solución. Haremos cualquier cosa por esa solución que sencillamente no existe porque un(a) psicópata no siente empatía, no cambia y la situación solo puede empeorar.

A través de la aceptación del dolor recuperaremos la paz y la tranquilidad. Es normal ese dolor al contactar con la tristeza por la salud física, mental y emocional perdida. Sintiendo y reconociendo estos sentimientos es que podremos salir, recuperar nuestras emociones, la paz interior... y sanar esa violación del alma, ese trauma tan profundo, producto de una manipulación perversa, en la que el psicópata combina magistralmente seducción y traición.